
Según un acuerdo, realizado en 1986 en la CBI, organismo encargado de la protección de estos mamíferos a nivel mundial y al que pertenecen 72 países, entre ellos Japón, se puso una moratoria a la caza de estos cetáceos con fines comerciales. Pero los japoneses siguen matando a las ballenas arguyendo que las matan con fines científicos. Y lo mismo hacen Islandia y Noruega.
Se dice que Japón apoya económicamente a todos los que voten a su favor dentro de la CBI, pero España, Francia, Italia, Estados Unidos, Alemania e incluso México, se han opuesto en forma determinante a que los japoneses se salgan con la suya.
Greenpeace estima que 69 % de los japoneses repudian la caza de ballenas, mientras que un 4% de la población considera la carne de este cetáceo como un manjar exquisito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario